Acaban de empezar a rodar los 70’s cuando Mercedes Benz decidió renovar su mítico Pagoda, lo haría con una nueva generación del Mercedes SL que gozo de gran popularidad entre los inquilinos de la meca del cine estadounidense de la época.
El SL era más pesado, más basto en cierta manera, mucho menos estilizado que su predecesor el Pagoda, montaba una gran parrilla presidida por una enorme estrella, incluso, compartía con el Pagoda esa maniobra en el techo descapotable que hacía parecer que la parte central era más baja que los laterales.
Sin embargo, la acogida fue bastante fría en el resto de mundo, incluso por la prensa especializada que lo veía como una evolución del modelo anterior más que algo nuevo.
Con el avance de la época se mejoraron los motores y ojo, el tratamiento de la carrocería que se oxidaba en las primeras versiones y se redujo bastante el consumo.
En estos vehículos siempre es más recomendable la versión ligera 280 o 300 versus la versión V8 mucho más costosa de mantener si las enfrentamos a las 6 cilindros.
18 años son los que ha permanecido en el mercado este vehículo que para los amantes de las series de los 80 lo podrán encontrar en el American Gigolo de Gere o en la mítica serie Dallas.
Como curiosidad las versiones americanas portaban unos parachoques de goma que afeaban terriblemente su perfil, pero que eran necesarios para superar las normas anti choque del país.
Un vehículo único de los que por cierto, puedes encontrar una unidad en nuestro stock, esta unidad fue fabricada en 1985 -sin problemas de carrocería- y lleva el motor V6 más fácil de mantener.
Una inversión de futuro que puedes ver aquí Mercedes SL 300 W107 Madrid