El sedán que quiso vestirse de coupé

coches de ocasión

Ya hemos  hablado varias veces de los coches incatalogables, aquellos que por una u otra razón se resisten a ser etiquetados y se salen de las normas para presentar un concepto único y diferente…. este caso es similar aunque con alguna que otra peculiaridad como no podría ser de otra manera en Mercedes-Benz.

El CLS es un sedán, sus medidas, su espacio interior, sus puertas pero no intenta parecer un sedán, todo en el esta diseñado para acercarse a la figura de un coúpe o un gran coúpe y en esencia esa deportividad es la que trata de exportar a este segmento, un espejismo que deja de serlo cuando al conducirlo descubres el alma deportiva de este CLS.

Máxime si puestos a elegir una versión elegimos la del coche de segunda mano que nos atañe, AMG tiene la culpa y sus 557 CV de que este coche nos enamore, con un comportamiento en carretera impecable y un cuidado exquisito por los detalles este coche enamora desde la primera conducción… ¿podría hacer un sedán lo mismo? quizás si, pero indudablemente lo haría de otra manera, bien distinta, las sensaciones al conducir al fin lo son todo y en este CLS se puede notar su deportividad en cada conducción, el nervio, y agarre en cada curva.

Sin embargo, las plazas traseras nos sacan del espejismo, las plazas traseras del CLS son suficientes en tamaño, incluso cómodas y así nos volvemos a quedar si etiqueta alguna para este CLS… ¿Coúpe? ¿sedán? simplemente CLS