Siempre nos han enseñado que no se puede tener todo, no se puede comer dulces y estar a dieta, no se puede tomar el sol y no ponerte moreno… rara vez te encuentras algo tan redondo que cumple todas tus expectativas, si además es un coche… tendremos que hablar de ello.
No esperes encontrarte este coche en cada esquina, ni siquiera esperes verlo adelantarte en la autopista precedido de un sonido estridente, ya que, la primera seña de identidad de este vehículo es la exclusividad, un único motor V6 y un precio de salida de 45.600 € que lo convierten en el sueño de muchos que pocos pueden conducir.
La segunda la encuentras cuando entras y ves su consola central, todo esta dispuesto con un gusto exquisito y goza de algo que los vehículos de alta gama ya tenían olvidado, la sencillez.
El navegador es táctil y el resto de controles son altamente intuitivos, no necesitas un larguísimo manual para entenderlos, un selector circular y poco más de un par de minutos para poder entender y configurar todo tu coche, increíble pero cierto… un coche de alta gama en el que podrás aprender a usar todas sus funciones.
Dominando la consola central te encuentras nada más y nada menos que el mítico reloj de Infiniti, si le añades que nuestra unidad tiene además asientos de color rojo y el salpicadero en negro te encuentras con un coche que es un lujo para lo sentidos.
Y es que, a pesar de parecer un automóvil discreto de esos que no llaman la atención a primera vista sus 320 CV proporcionan sensaciones únicas, su conducción es espectacular, tan potente como cualquier coúpe de suma gama pero tan suave y agradable como la berlina más lujosa.
Al fin, un cúmulo de virtudes que convierten este coche en uno de esos vehículo que tienes que conducir para enamorarte de él.
¿por cierto os habíamos dicho que era un descapotable?
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