Es una de las marcas con más arraigo en España y varios de sus modelos se cuelan cada año en las primeras posiciones de las listas de ventas. Seat presume de una larga trayectoria en nuestro país, en la que ha protagonizado verdaderos hitos como el lanzamiento del icónico 600 o del aún hoy exitoso Ibiza. Hoy nos hemos propuesto adentrarnos en la historia de la compañía y seleccionar los que, quizá, hayan sido sus mejores modelos (atendiendo a sus prestaciones contextualizadas). Sabemos que se trata de una cuestión muy subjetiva y por ello os invitamos a que completéis o modifiquéis la lista según vuestro criterio.
Imagen del Seat 850 extraída de Historiaseat.com.
1. Seat 850: uno de los modelos históricos más en boga estos días por conmemorarse el 50º aniversario del inicio de su producción (no descartamos en absoluto dedicarle un post específico próximamente, estad atentos). Este vehículo amplió los horizontes del 600 y se convirtió en casi un símbolo para la clase media que se abría camino en España. Más espacio, más potencia y, por primera vez, cuatro puertas (aunque no en la versión original, que contaba solamente con dos). Dejó de fabricarse en 1974 tras vender algo más de 600.000 unidades.
Imagen del Seat León Cupra extraída de Seat.es
2. Seat León Cupra: damos un notable salto desde casi los orígenes de la marca hasta la actualidad para encontrarnos con un modelo llamado a crear su propia leyenda. El Cupra es el vehículo más potente que Seat ha fabricado en serie, con hasta 280 CV y planes filtrados para elevar la potencia hasta los 300 CV en las próximas versiones. Esta línea ha servido como referencia para desarrollar algunos de los modelos con los que Seat ha participado en competiciones automovilísticas. Sin lugar a dudas, es la cara más agresiva de Seat.
Imagen del Seat 1.200 Sport extraída de Autofacil.es
3. Seat 1.200 Sport: si esta denominación no te dice nada, quizá la de Bocanegra te suene más. Apenas se mantuvo cinco años en producción (de 1975 a 1980) pero causó una gran sensación por romper con la estética imperante hasta el momento. Horizontalidad, estabilidad y, sobre todo, originalidad, fueron las señas de identidad de este modelo. Y es que, con el 1.200 Seat marcó distancias como marca al dejar de copiar lo que se producía en otros lugares, siendo, por cierto, el primer modelo íntegramente fabricado en la planta de Martorell.
Imagen del Seat 127 extraída de Seatfansclub.com
4. Seat 127: un éxito de ventas en toda regla. Seat trabajó sobre la base del 850 para conseguir un modelo todavía más popular aunque de diseño sobrio. Una curiosidad histórica que explica el porqué de su bajo consumo de acuerdo con los estándares de la época es que el mundo asistía a la primera Crisis del Petróleo (se empezó a fabricar en 1972), por lo que la marca entendió que había que mejorar la eficiencia para que su mantenimiento no fuera tan costoso. De tracción delantera (el primero de este tipo fabricado por Seat), ofrecía unos interesantes 52 CV y fue uno de los primeros modelos en el que los compradores pudieron escoger entre bastantes colores.
Imagen del Seat 124 Sport Coupe 1.800 extraída de Autofacil.es
5. Seat 124 Sport Coupe 1.800: en su momento, supuso un récord para la marca tanto en la cilindrada (1.756 cc) como en la potencia (118 CV) y estaba claramente enfocado a uno de los mercados que tradicionalmente han sido más esquivos para Seat, el de gama media-alta o alta. Disponía de suspensión delantera independiente, caja de cambios de cinco velocidades y la compañía lo presentaba como un ‘deportivo de lujo’. Desde luego, el cupé se benefició de que durante su paso por el mercado (1971-1975) no tuvo que enfrentarse a una gran competencia.
